He aquí una descripción bizarra.
Me encanta lo que me está pasando. Creo que me encanta todo lo que es fantasía y es de algún modo, poro probable y difícil. Me siento bien, porque a pesar que nada esté pasando, estoy plena.
El enamoramiento funciona así: estupidez, estupidez, felicidad, estupidez, estupidez, felicidad de nuevo, estupidez estupidez. Decepción. O tal vez no, todo depende.
Me siento plena cuando se que las cosas están equilibradas, sin demasiados excesos y cuando estoy llena de incertidumbre. Si, incertidumbre. Soy una cobarde, no me animo a adentrarme a territorio desconocido, y mucho menos bajo las líneas enemigas.
El paso siguiente es la decepción, o también conocida como momentánea depresión. Soy impulsiva por lo que hago/siento, luego pienso. Y me deprimo al sentir cosas que crea mi cabeza, muy rápidamente. ¿Les dije que soy impulsiva?
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